1- Has experimentado la pérdida de un hijo no nacido a través del aborto, ya sea de forma voluntaria o involuntaria.
2- Has experimentado la pérdida de un hijo debido a su desaparición, ya sea por circunstancias desconocidas o traumáticas.
3- Sientes la necesidad de reconocer y procesar el dolor, el duelo y las emociones asociadas con la pérdida de un hijo no nacido o desaparecido.
4- Deseas encontrar un espacio seguro y de apoyo para expresar tus emociones y compartir tu experiencia sin juicio ni estigma.
5- Buscas sanar y liberar las cargas emocionales y espirituales relacionadas con la pérdida de un hijo, permitiéndote encontrar la paz y la aceptación.
6- Quieres explorar y trabajar en la reconciliación emocional y espiritual con el hijo no nacido o desaparecido.
7- Estás dispuesto/a a enfrentar y procesar los sentimientos de culpa, tristeza, rabia u otras emociones que puedan estar presentes en relación con la pérdida.
8- Deseas fortalecer tu autoestima y cultivar una mayor compasión y amor propio a través de la sanación de este duelo.
9- Buscas integrar la experiencia de la pérdida en tu vida y encontrar un nuevo sentido de propósito y significado.